lunes, 25 de enero de 2010

Happily ever after


Ya no nos quedan princesas que lleven vestidos largos y rosas con tacones de cristal. Ni las chicas con corona, tan dulces como la primavera, las que duermen siglos para esperar a su príncipe azul. Las princesas de antaño se extinguieron para dejar paso a las de hoy en día.
Princesas con faldas ajustadas, labios rojos y melenas cortas. Chicas sin corona, tan cálidas y relucientes como el verano, mujeres que no esperan al príncipe y mucho menos al que viste de azul. Ahora son frías, arrogantes, calculadoras y portadoras de un inconformismo crónico que les hace el trabajo más complicado a estos.
Ya no esperan un final feliz, comiendo perdices y rodeadas de lujo. Hoy por hoy buscan en cada minuto una felicidad más efímera y real. Y no esperan que un truco de magia para llegar a tocar las estrellas, tienen conciencia de la inexistencia de los milagros. Las que han cambiado el vals por pistas de discoteca y las noches solas en ausencia de su amado por descontrol nocturno. Ellas ya no juegan con el rol de muchacha indefensa, necesitada de un hombre para encaminar su vida y protegerla.

Las princesas ya no siguen cánones de belleza, no tienen porque envenenarse con manzanas para ser salvadas por sus príncipes, no tienen que portar exuberantes vestidos y tocados. No viven en castillos custodiados por dragones. Tan solo son cuentos que una vez consiguieron encandilarnos.

jueves, 21 de enero de 2010

La chica de azul, si esa.

Gira a la izquierda y continua recto por la calle de tus rutinas hasta llegar allí.
Párate a observar delante del cristal y abre la puerta en busca de alguna casualidad mezclada entre la gente.
Si quizás te parezca solo una lavandería, pero a qué no sabes que a esa chica de allí…
Si la chica del pelo corto y flequillo recto.
Que, si, esa la morena, con camisa de cuadros ancha y vaqueros desgastados.
A ella lo que más le gustaría en el mundo es conocer a su amor por pura casualidad en una lavandería. Asíque ya sabes, da cuatro pasitos y sonríemela.
Pero te aviso, si te acercas a ella, trátala como su fuera de porcelana. No creo que te hagas la minima idea de lo incalculable que es su valor y lo poquito que cuesta romperla.
Ella es complicada, un pequeño puzzle de ojitos oscuros, que puede conseguir llenar tu vida con tan solo enseñarte su maravillosa sonrisa.
Te podrá parecer simple esto que te estoy diciendo, querido, pero lo que tienes ahí a menos de un metro no es cualquier chica.
Ella es perspicacia, palabras perfectas para cada instante, pretéritos pluscuamperfectos sin faltas de ortografía…
Ella es exactamente aquella canción de los 80, de los cure, te sonaran, ¿verdad?, pues entonces ya la conoces, ella es Friday Im love.

sábado, 16 de enero de 2010

inventa un cielo para mi.


Quizás sea estrepitosamente irritable o demasiado quejica.
Quizás sea una simple hipócrita que pide más de lo que da y reprocha cada
suspiro. Quizás también sea una víctima más del inconformismo crónico, y me guste y no
a la vez. Quizás sea otra estúpida imposible .
No estoy segura, pero hay algo de que si.
¿Qué es?¿Dónde rebosa tu seguridad? me dirás.
Y yo te dire que se encuentra en ti. Cuanto eres tú quien consigues hacer caso
omiso de mis defectos sacando solo mis virtudes, haciéndome sentir la inconformista estúpidamente irritable más feliz del mundo.
Y también sé que eres el único que me saca sonrisas sin querer, y aunque a veces
te las esconda, siempre lo haces.
No tengo duda en que eres tequieros enlatados en cada latido que marca la marcha de mi corazón.

Gracias por ser la parte más importante de mi vida.
O simplemente, gracias por existir.

martes, 12 de enero de 2010

Maldita nieve de este largo enero..


Harta de ser la reina de las disculpas múltiples e inútiles, la princesa en tierras desiertas, la infanta de la ciudad de la ingratitud y de ser una ficha más. Harta de vivir desgarrándome el alma día tras día intentado evadir mi cruel realidad, tristes rutinas seguidas de lágrimas frías y sin sentido que daban lugar a la desesperación ante no poder controlar lo que me rodeaba, de no actuar por mi propia cuenta y del cansancio que produce el ser ilegible para los demás. Harta de seguir tomándome la vida como un simple juego al que me creí capaz de dominar sin duda alguna.
Se me quiso devolver doblemente la jugada por alguna razón, aún no conocida. Me convertí en una pieza más de aquel enorme tablero de ajedrez. Empecé a ser manejada, creyendo ser yo quien actuaba. Comencé a encomendar mis sílabas a los demás, pero sin dejármelo ver a mi misma estaba claro. Creí estar jugando de reina mientras que solo era un peón, al cual se podría sacrificar en cualquier momento.

-Y de nuevo, jaque mate, querida.

Otra vez cae el viejo rey y todo su ejército con él, los que jamás le fallarían y los que como yo, nos encontrábamos atrapados allí.

Quizás fuera un pequeño paso para comenzar a dar algo de color a aquella monotona fotografía que resumía mi vida.

lunes, 11 de enero de 2010

Perdiendo latidos


Y otra mañana más me despierto como si anduviera perdida por el círculo polar
ártico buscando a mi amante con desesperación.Y como cualquier otro día sin ti siento como me llueve por dentro, como cada gota hace aún más daño que el anterior. Pero ojala eso fuera lo peor, hoy por hoy tengo que recordarme a mi misma que debo respirar y persuadir a mi corazón para que no deje de latir.
Él se niega rotundamente, desea con ansia volver a ti, pero no le puedo dejar.

Quizás no lo entiendas, pero no puedo, por mucho dolor que me cause
y por mucho que mi cama se queje del frío que pasa sin ti.
Bien sabes tú, que una imagen vale más que mil palabras. Y una mirada puede llegar a hablar mucho más claro que cualquier boca e incluso en menos tiempo.
Y tú mismo decidiste.
Pero como me atormenta el pensar que no volveré a probar del mar de tus labios..
Siempre he tendido a la exageración, he de admitir, pero al estar contigo muchas veces tuve la certeza de que por fin dejaría de cometer errores probando nuevos labios. También pensaba que tú pasarías a ser parte de un nosostros conmigo en cuanto pudieramos..

Pero ya ves, con solo asomarte a mi ventana puedes ver que desde que mis ojos no te encuentran, la lluvía no ha cesado de atormentarme.

viernes, 8 de enero de 2010

Un descafeinado,porfavor.


Otra tarde de domingo acompañada por el sonido de la lluvia y los susurros del viento
decidí encomendar mis pasos al destino.
Y como toda triste y lluviosa tarde de domingo me dirigí al café Gijón. Suelo culpar al destino
de obligar a mis pies marchar en dicha dirección, pero sería cruel otorgarle el peso de aquel duro
crimén, siendo obvia la real causa.

Sequé mis pies y me deslicé por la entrada. Colgé mi gabardina y mi sombrero con sumo cuidado en el
enorme perchero y di un paso adelante.
Segundos después intente eludir su mirada, pero hay cosas que a uno el corazón no le permite.

Ahí estaba de nuevo ella, la real causa por la cual mis piernas bailaban hacia el olvidado cafe
bajo la lluvia todos los días. Ella, sentada en una mesa, sola, con su estrecho vestido rojo, con sus largos guantes
negros... Era pura elegancia y sensualidad. Aquel lunar cercano a su boca, aquellos rizos de oro que
se dejaban entrever de vez en cuando bajo el humo de su cigarrillo.

Me senté en una mesa algo más centrada que la suya y pedí mi descafeinado. Siempre elegía ese sitio.
Ya que desde allí podía escuchar como tarareaba aquella bella canción, con su voz aterciopelada, me
deleitaba con la vie en rose cada fin de semana lluvioso.

Pero como todo domingo me pregunté el porqué de tararear esa canción, que trataba de amor, si siempre
se encontraba sola, con su mirada fría y distante, al acecho ante cualquier hombre, con su cigarrillo
y su boquilla nublando el ambiente...

Y como todos los domingos llegaba a la misma inconclusión, no conseguía encontrar la sálida de
aquel complejo laberinto de ojos negros. Me preguntaba acerca de su pasado, de quién pudo habitar
en aquel obsoleto corazón...

Aquella mujer era completamente distinta, perturbadora, era un historia difuminada cubierta por una
capa helada que me impedia rotundamente la entrada, era incluso un reto para un Don Juan como yo.

miércoles, 6 de enero de 2010

Oh, bendita infancia.


Cielos de dulce, arena en el parque, sonrisas que resbalan, curiosidad ilimitada, mares brotando de los ojos capaces de inundar continentes,
twist una vez más,domingos soleados en tu compañía, volar, volar y subir más alto...

-¿Verdad que echas en falta cuando aún poseía aquella fragancia extremadamente envriagadora? ¿Cuando mis alas me permitían tocar lo infranqueable?
¿Cuando los llantos no eran por consecuancias de dardos en el corazón? ¿No echas en falta oírme balbucear tu nombre, mamá?

La melancolía, es el estado en el que uno se posiciona al pensar sobre los tiempos pasados, los momentos felices, la tierna infancia.
Ver como el tiempo nos embaucó con sus duras garras, cambiandonos las alas por leves responsabilidades. Responsabilidades que ensancharon con el tiempo..

-Pero, ¡Calla!, no caigas en su juego, no le hagas que gane terreno. Aún lloras sin sentido, aún vuelas con tus alas, por pequeñas que sean, aún te dejas
llevar por carcajadas, aún podrías balbucear mi nombre si lo quisueras, aún posees parte de aquel intenso fulgor, que jamas se acaba. Creeme, siempre habrá una
niña en ti, si no la ves, quizás es que no la quieras dejar salir.

domingo, 3 de enero de 2010

Yo soy el narrador, y esto es solo el prólogo


Eres notas musicales desafinadas perdidas por el aire.
Eres sonrisa entre mil llantos
Eres aquella vieja canción de los ochenta que aun sigue sonando tan bién aunque solo las escuchemos pocos.
Eres vida, paz continua, eres pasión, eres mi cachito de cielo.
Eres el tiempo que me falta por colorear.
Eres todos los catorces de septiembre.
Eres calma en mi tempestaz.
Eres sonrisa entre mil llantos.
Eres la causa de temblores de piernas.
Eres éxtasis en vena.
Eres consecuencia de las pequeñas casualidades.
Eres la primera y la única parte de mi película.
Eres un recuerdo vivo.
Eres simplemente, lo que más quiero.